Viviendo con asma como adulto

El asma es a veces erróneamente visto como una enfermedad infantil, pero puede desarrollarse a cualquier edad. El asma resulta tan común en los adultos que es una de las principales causas de absentismo laboral. De hecho, si no está bien controlada, el paciente puede experimentar una gran cantidad de síntomas, como dificultad para respirar, sibilancias, opresión en el pecho y tos, que pueden interferir con la vida diaria, el sueño y las actividades físicas.

Llevar una vida normal con asma es posible si aprende a manejarla. Eso significa que necesita el apoyo médico adecuado y un plan de tratamiento personalizado y, en algunos casos, adaptar su estilo de vida. Si es proactivo y toma su medicación de control según lo recetado, puede reducir los síntomas y los ataques.

Asma en el trabajo

Trabaje en interiores o exteriores, su lugar de trabajo puede exponerle a irritantes y alérgenos, como vapores químicos, polvo industrial o de madera, disolventes, plagas, mohos, humo de vehículos, ozono y humo de segunda mano, que pueden causar o, con más frecuencia, agravar sus síntomas.

Si su asma apareció por primera vez en la edad adulta, después de la exposición en su lugar de trabajo, o si su asma empeora cuando está en el trabajo en comparación con cuando está en casa o de vacaciones, puede tener «asma ocupacional». Debe ver a su médico de inmediato para evitar problemas a largo plazo en sus pulmones.

Acerca de «trabajos riesgosos» y posibles desencadenantes del asma

Trabajos

Posibles desencadenantes del asma

Manipuladores de adhesivos

Productos químicos

Trabajadores con animales, veterinarios

Proteínas animales

Panaderos, molineros, agricultores

Granos de cereales

Fabricantes de alfombras

Gomas vegetales

Trabajadores del metal

Cobalto, níquel

Trabajadores de la producción de alimentos

Leche en polvo, huevo en polvo

Trabajadores forestales, carpinteros, ebanistas

Polvo de madera

Peluqueros

Colorantes

Trabajadores de la salud

Látex y productos químicos

Trabajadores farmacéuticos, panaderos

Medicamentos, enzimas

Procesadores de mariscos

Arenque, cangrejo de las nieves

Pintores, instaladores de aislamiento, trabajadores de la industria de plásticos y espumas, soldadores, trabajadores del metal, fabricantes de productos químicos, manipuladores de goma laca

Productos químicos

Trabajadores textiles

Colorantes, plásticos

Usuarios de plásticos o resinas epoxi, fabricantes de productos químicos

Productos químicos

Si tiene un trabajo de alto riesgo, su empresa tiene la responsabilidad legal de protegerle contra sustancias peligrosas.

Evitar o reducir la exposición es la mejor manera de protegerse. Actúe tan pronto como note síntomas en el trabajo, ya que cuanto más tiempo esté expuesto a irritantes, peores pueden volverse sus síntomas y más tiempo le llevará mejorar.

Es muy importante que vea a su médico de inmediato si sospecha que tiene asma ocupacional, para que pueda ser diagnosticado y recibir asesoramiento sobre cómo evitar la exposición continua. A veces, esto requiere un cambio de trabajo. La derivación a un especialista puede ser necesaria.

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